MELT es una empresa especializada en proyectos en metal ubicada en Carral, A Coruña.
Trabajan el metal para moldearlo a cualquier tipo de proyecto: estructuras para obras, puertas correderas para viviendas y mobiliario a medida para locales profesionales.
Fabrican cualquier tipo de producto a medida para que encaje a la perfección con tu idea o, si lo prefieres, puedes dejar en sus manos el diseño de tu pieza.
Se pusieron en contacto con nosotros para el diseño de naming e identidad corporativa.
Su gerente, Marcos, buscaba una identidad de marca diferenciadora en un momento en el que se encontraba expandiendo su actividad profesional a otros sectories especializados de la carpintería metálica.
¡Empezamos!
MELT necesitaba un naming. El proyecto de Marcos no contaba con un nombre comercial, ya que hasta ahora trabajaba como autónomo. Ahora, su mercado se expandía incluso fuera de España, por lo que debía adaptarse a mercados internacionales. Sabiendo esto, nos pusimos a jugar:
Nuestros términos en el juego consistían en soldar, unir, quemar, fundir y palabras similares en inglés.
Buscábamos un nombre corto, a ser posible (más fácil de recordar) que pudiese hacer referencia a su actividad profesional, sin ser literales.
Jugando con el nombre de Marcos y estas palabras, surge MELT; melt significa fundir, un verbo que realiza día a día en su trabajo. Además, la M de Marcos estaba al inicio de su palabra. Ya teníamos nombre.
Para este proyecto, nos basamos en una tipografía con una apariencia técnica, pesada y con carácter. Diseñamos cada letra del logotipo MELT para que encajase con la idea que teníamos sobre su aspecto: líneas rectas perpendiculares a su eje X (como la L y la T) y ángulos marcados, como en la M.
Sólo utilizamos las formas redondeadas en los vértices de cada letra, para redondear su «acabado».
La «+» es el elemento gráfico identitario de MELT. La cruz representa el punto de unión, que es precisamente lo que realiza Marcos al soldar y trabajar el metal. Junto con la M, representa el inicio y el final de MELT (M el inicio, donde escondemos la palabra Marcos, y el «+» es la T y final de la palabra MELT).
Conseguimos así un símbolo que puede usarse en superficies más restrictivas en cuanto a tamaño y visualización.
Después de concluir la investigación de mercado, escogemos un tono verde vivo, que nos ayudará a diferenciarnos de su competencia y nos transmite una sensación jovial, enérgica y segura.
En otra versión del logotipo, los colores escogidos son el negro y el gris para escoger una comunicación más seria y técnica con el fin de solucionar comunicaciones más profesionalizadas.
Con todo esto, comenzamos a crear la propuesta basándonos en todo lo anterior.
¿Quieres que demos forma a tu proyecto contigo?
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